La conferencia-taller que impartí el pasado miércoles en el Conservatorio Profesional Arturo Soria de Madrid fue un éxito de público y recepción. No cabía más gente en la sala asignada, hubo muchísimos alumnos del conservatorio (además de profesores, compañeros de profesión y otros interesados), se hicieron apreciaciones y preguntas interesantes, y parece que la semilla de la curiosidad quedó plantada… ¡algunos padres me decían después que los chicos habían salido pidiendo arcos barrocos!
Yo aprendí mucho (durante la preparación, y también una vez allí), y me lo pasé muy bien, así que voy a repetir en cuanto pueda…
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